COLO MAIOLA: “EL FÚTBOL ARGENTINO ESTA MUY ATRASADO”

Nuevas ligas, torneos nacionales y un proyecto sólido. La disciplina crece al calor de la pasión de una ola cada vez más imparable de mujeres futboleras.

Ellas lo estan haciendo crecer. Si bien no todas vienen de una dinastía futbolera, la pasión trasciende toda barrera y el fútbol femenino avanza en nuestro pais.Tratando varios temas vinculados al crecimiento de esta disciplina, algo que ocupa desde hace muchos años a Maiola, que comenzó a desempeñar su profesión de futbolista en Tigre y se vinculó por primera vez al fútbol femenino hace cinco años en Excursionistas, cuando asumió el título de director técnico. Sin embargo, fue quien presentó el proyecto de instaurar la actividad al club de Victoria.

Le siguieron tiempos de lucha al fútbol femenino, desde su profesionalización hasta la forma en la que se encara en nuestra sociedad, así como también la cantidad de equipos, la creación de dos divisiones más y con una proyección de inferiores.

En búsqueda de un futuro prometedor para el fútbol femenino en la Argentina, “Colo” asegura: “el futbol argentino está muy atrasado, incluso comparándola con países de la región y menos futboleros que el nuestro”. Adiciona que a su entender, sucede justamente por la cultura eminentemente machista que nos rodea en el fútbol, que cuesta mucho cambiar y el cambio va pasando de a poco. La intolerancia de algunas personas por el lugar que se está haciendo, incomoda e intimida en su mayoría a los hombres

Comentarios como "andá a la cocina" o “las mujeres no deberían jugar a esto” –cita textual de un árbitro español- y otros descalificativos machistas son una constante en el muro de comentarios de cualquier red social en incluso medios, son adherentes en el día a día. La repercusión de los comentarios machistas afecta tanto a las jugadoras, como a todas las mujeres que comparten su amor por el fútbol. Atenta contra la profesionalización ya obtenida, logrando un retroceso social irreparable.

Sin embargo también sostuvo que aunque cambiar costumbres y culturas es difícil, es acompañado por los cambios sociales con respecto al lugar de la mujer en las sociedades modernas. En Argentina va despacio pero no cree que se detenga ese proceso.